La Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC) de El Alto ha vuelto a intervenir el bar «La Colmena», ubicado en la zona 12 de Octubre. En el operativo, más de 100 personas fueron sorprendidas consumiendo bebidas alcohólicas en horarios no permitidos, además de encontrarse equipos telefónicos de procedencia dudosa. A pesar de haber sido clausurado en ocasiones anteriores, el local continuaba operando de manera ilegal.

Reincidencia y violación de normas

El comandante regional de la Policía de El Alto, coronel Adrián Álvarez, informó que esta no es la primera vez que «La Colmena» es intervenida por las autoridades. A pesar de haber sido clausurado por la Intendencia Municipal en ocasiones anteriores, el establecimiento volvió a abrir sus puertas, violando las normativas vigentes.

«Lamentablemente, nuevamente realizamos la intervención en este local que, a pesar de las advertencias y clausuras, reabrió y estaba vendiendo bebidas alcohólicas fuera de los horarios permitidos», explicó el comandante Álvarez.

La Ley 259 y la normativa municipal de El Alto prohíben la venta y consumo de bebidas alcohólicas los días lunes y martes, restricciones que el bar «La Colmena» desobedecía. Esta situación ha generado preocupación en las autoridades, quienes consideran al local un foco de inseguridad en la zona.

Más de 100 personas arrestadas

Durante el operativo, se encontraron a 108 personas en el interior del local, entre las cuales había 74 hombres y 34 mujeres, todos en estado de ebriedad. Las autoridades procedieron a arrestarlos por infringir la normativa. Además, se detuvo a dos administradores del local y a cuatro personas que trabajaban como personal de seguridad.

«Estas personas, que cumplían funciones de seguridad, monitoreaban a la Policía mediante cámaras de videovigilancia para alertar sobre los operativos y evitar la intervención policial», detalló Álvarez.

El sistema de vigilancia instalado en el bar permitía a los administradores cerrar las puertas desde el interior para evitar que las autoridades ingresaran, una práctica que buscaba evadir los controles policiales y municipales.

Equipos robados y actividades delictivas

Uno de los hallazgos más alarmantes durante la intervención fue el descubrimiento de nueve teléfonos móviles cuya procedencia no pudo ser justificada por los presentes. Estos dispositivos serán remitidos a la FELCC para la investigación correspondiente, ya que se sospecha que podrían haber sido robados.

«En las requisas se han encontrado celulares de procedencia dudosa. Estos equipos serán investigados por la FELCC para determinar si fueron robados», añadió el comandante policial.

El bar «La Colmena» ha sido señalado por las autoridades como un punto de concentración de personas que, tras consumir alcohol en horarios irregulares, provocan disturbios en la vía pública y podrían estar implicadas en delitos en la zona.

Reiteradas clausuras sin éxito

A pesar de los esfuerzos por clausurar el local, «La Colmena» continúa operando de manera clandestina. Las autoridades municipales y policiales han intervenido en varias ocasiones, pero los propietarios y administradores del lugar encuentran formas de reabrir y seguir con sus actividades ilegales.

«Este tipo de locales generan inseguridad en la zona y es preocupante que, a pesar de las clausuras, vuelvan a operar. Seguiremos interviniendo hasta que se cumpla con la ley», enfatizó Álvarez.

Un foco de inseguridad en El Alto

La zona 12 de Octubre, donde se ubica el bar, ha sido identificada por las autoridades como un área propensa a disturbios y crímenes menores. El consumo desmedido de alcohol en este tipo de establecimientos no solo genera desórdenes en la vía pública, sino que también podría estar relacionado con la comisión de delitos, como el robo de los celulares encontrados en el lugar.

El operativo de la FELCC ha logrado, una vez más, poner fin temporalmente a las actividades de «La Colmena», aunque persisten las dudas sobre la efectividad de las clausuras y las sanciones impuestas.

EC/Andina