Más del 50 % de los talleres y emprendimientos cerraron sus puertas; sector se declara en emergencia y exige respuesta del Gobierno mediante Decreto Supremo
Crisis en El Alto: la microempresa al borde del colapso
La Federación Regional de la Micro y Pequeña Empresa de la ciudad de El Alto ha declarado este martes un estado de emergencia ante el cierre de más del 50 % de sus unidades productivas. Guillermo Chávez, representante del sector, urgió al Gobierno nacional a emitir un Decreto Supremo que ordene un periodo de gracia con las entidades bancarias de al menos un año.
“Pedimos al Gobierno que se ponga del lado del pueblo y dé cumplimiento a este pedido con un decreto supremo. La banca no ha perdido, al contrario, ha ganado durante todos estos años”, afirmó Chávez en declaraciones a los medios.
Exigen al Gobierno una medida concreta
La demanda principal del sector es que el Ejecutivo dicte un Decreto Supremo que establezca un periodo de gracia para el pago de créditos bancarios, a fin de que los microempresarios puedan enfrentar la severa crisis económica que atraviesa el país sin la presión de las obligaciones financieras.
“Nosotros tenemos que pagar alquiler de tiendas, salarios, impuestos y sobrevivir con una canasta familiar que no deja de subir, y aún así tenemos que cumplir con los bancos”, sostuvo el dirigente.
Un pedido que viene desde septiembre
Chávez recordó que esta solicitud no es nueva. El pasado 2 de septiembre, la federación realizó una marcha desde la cervecería de El Alto hasta el Ministerio de Economía, donde entregaron un pliego petitorio que incluía esta misma demanda. Sin embargo, hasta la fecha, no han recibido una respuesta efectiva.
“Reiteramos y ratificamos este pedido. Aplaudimos que otras organizaciones que antes estaban calladas hoy se sumen. Haremos los nexos necesarios para hacer fuerza conjunta”, anunció Chávez.
“El sector productivo está asfixiado”
La situación, según el representante, es crítica. A la carga financiera se suma la inestabilidad generada por constantes bloqueos que impiden la comercialización interna de productos, el aumento de los costos operativos y la falta de incentivos para el sector productivo.
“Todo este cúmulo de cosas nos afecta gravemente. El sector productivo está asfixiado y necesita una respuesta inmediata”, advirtió.
¿Qué propone el sector?
Si bien la propuesta inicial es un año de gracia, Chávez señaló que el sector estaría dispuesto a negociar plazos más amplios si existiera voluntad política. “Podrían ser 24 meses, si el Gobierno tiene la voluntad lo puede hacer. Lo importante es que se atienda de una vez”, dijo.
Una advertencia al Gobierno
La declaración de estado de emergencia no es simbólica. La federación advirtió que, si no se escucha su demanda, no descartan medidas de presión más radicales. Por ahora, llaman al Gobierno a asumir su rol frente a una crisis que, aseguran, podría agravarse aún más si no se adoptan medidas urgentes.
EC/Andina