Oscar Elías denuncia crisis económica, falta de combustible y amenaza con radicalizar medidas si no hay respuesta del Gobierno
Protesta con fuerte simbolismo
Con ollas vacías en mano y gritos de protesta, gremiales de la ciudad de El Alto descendieron este lunes hacia el centro de La Paz exigiendo al Gobierno soluciones inmediatas a la crisis económica. El ejecutivo del sector, Oscar Elías, advirtió que el hambre y la desesperación están alcanzando niveles críticos entre la población alteña.
“La canasta familiar se ha duplicado en precios y ya no tenemos qué comer. Esta no es una marcha política, es una marcha de hambre”, declaró Elías en contacto con los medios durante la movilización.
Exigen respuestas estructurales
Los gremiales denuncian la falta de medidas concretas frente a la escasez de combustible, el encarecimiento de los productos básicos y la presión de los bancos por el pago de créditos.
“No hay propuestas, no hay diferimiento, los bancos no perdonan. El pueblo necesita soluciones estructurales, no coyunturales”, enfatizó el dirigente.
La movilización se da en un contexto de creciente malestar social por los elevados precios de los alimentos y la falta de combustible en surtidores, una situación que afecta especialmente a los sectores populares que dependen del comercio minorista.
Rechazo a reuniones “excluyentes”
Elías también criticó al Gobierno por reunirse únicamente con una de las federaciones de gremiales de El Alto, dejando de lado a otras organizaciones que representan a amplios sectores del comercio en esta ciudad.
“El Gobierno no puede burlarse de la ciudad contestataria y revolucionaria que es El Alto. No aceptamos que sólo se coordine con una federación mientras otras quedamos al margen”, expresó con firmeza.
Advertencia de radicalización
Ante la falta de respuesta, el dirigente advirtió que el sector ya tiene definidas medidas más drásticas para los próximos días.
“Si no somos escuchados, vamos a radicalizar. El Gobierno debe entender que ya no hay paciencia. No queremos violencia, pero tampoco vamos a quedarnos con los brazos cruzados mientras la población sufre”, concluyó Elías.
La marcha culminó en el centro paceño con un contundente mensaje: las ollas vacías reflejan una realidad que no puede ser ignorada. Los gremiales esperan que el Gobierno escuche sus demandas antes de que el conflicto escale a niveles mayores.
EC/Andina