La concejal de El Alto, Fabiola Furuya, critica duramente a la dirigencia de Juan Carlos Huarachi y califica la marcha de la COB como un acto político dominado por funcionarios del gobierno.


La COB bajo fuego: Acusaciones de politización

Los concejales del Movimiento al Socialismo (MAS) pertenecientes al ala evista lanzaron severas críticas contra la dirigencia de la Central Obrera Boliviana (COB), cuestionando su representatividad y calificándola como un grupo de “politiqueros” que ya no defienden los intereses de los trabajadores. Así lo expresó la concejal de El Alto, Fabiola Furuya, quien apuntó directamente contra Juan Carlos Huarachi, secretario ejecutivo de la COB.

«La Central Obrera Boliviana realmente se ha descalificado. Ya no representa a los obreros, a los trabajadores, a los sindicalistas. Más parece un grupo de políticos que se han instalado ahí y están extendiendo su mandato», afirmó Furuya.

La concejal también señaló que la marcha organizada por la COB, que tuvo lugar el día anterior, fue principalmente apoyada por funcionarios del gobierno, en lugar de representar a los trabajadores que, según ella, deberían estar en primera línea de la lucha sindical.

Marcha de la COB: ¿Un acto político disfrazado?

Furuya denunció que la reciente movilización convocada por la COB tuvo poca participación de trabajadores reales y más bien contó con la asistencia de empleados públicos que, según la concejal, habrían sido obligados a asistir bajo la amenaza de perder sus trabajos.

«Ayer la población pudo ver que la gran mayoría de los marchistas eran funcionarios del gobierno. La gente no se va a dejar engañar», agregó la concejal, haciendo alusión a lo que ella califica como una marcha «supuestamente de los obreros».

La concejal fue más allá y aseguró que la marcha no buscaba reivindicaciones laborales reales, sino que respondía a los intereses del gobierno central para ganar apoyo en un momento de tensión política y social.

El mandato de Huarachi bajo la lupa

Uno de los puntos más polémicos mencionados por Furuya fue la dirigencia de Juan Carlos Huarachi, quien, según ella, ha extendido su mandato de manera indebida. Esta crítica se suma a las voces que cuestionan la legitimidad de su liderazgo al frente de la organización sindical más importante del país.

«El mandato de Huarachi venció hace más de dos años. Es lamentable que siga ocupando ese cargo cuando ya debería haber dejado la dirigencia», afirmó la concejal.

Créditos internacionales: ¿Una presión indebida?

Furuya también abordó la demanda de la COB de que la Asamblea Legislativa apruebe los créditos internacionales, una de las principales razones de la marcha. Si bien la concejal reconoce la importancia de estos créditos, enfatizó que es tarea del parlamento evaluar con responsabilidad si los mismos son beneficiosos para el país.

«Es obligación de los diputados y senadores valorar si estos créditos son o no convenientes para Bolivia. Ninguna organización puede obligar a los legisladores a tomar decisiones que no sean responsables», concluyó.


Un panorama de división

La situación descrita por Fabiola Furuya refleja una creciente fractura dentro del MAS y sus organizaciones afines, con el ala evista lanzando duras críticas contra sectores cercanos al gobierno de Luis Arce. Las tensiones dentro del partido, combinadas con las demandas sociales y la presión por los créditos internacionales, mantienen a Bolivia en un estado de incertidumbre política que, según parece, no tendrá una pronta resolución.

EC/Andina