El diputado Alejandro Reyes de Comunidad Ciudadana advierte sobre un «círculo vicioso» energético y económico en el país, provocado por la falta de capacidad de pago del Gobierno para abastecer de combustible.


Promesas incumplidas y una crisis que se agudiza

En una reciente declaración a los medios de comunicación, el diputado Alejandro Reyes, representante de Comunidad Ciudadana, denunció la grave situación que enfrenta Bolivia en cuanto al abastecimiento de combustible. Según Reyes, pese a las promesas del Gobierno de garantizar la distribución en las ciudades de La Paz y El Alto, la escasez continúa afectando a los transportistas y la situación parece empeorar con el paso del tiempo.

«Por segunda vez han engañado al transporte público, privado, prácticamente a todo el sector del transporte. Hace más de 90 días prometieron que no iba a haber desabastecimiento y ese es el pan de cada día», criticó Reyes, subrayando que las filas para abastecerse de combustible, que inicialmente duraban horas, ahora se han extendido a días, y teme que en el futuro lleguen a durar semanas.


Falta de capacidad de pago y escasez de dólares

El problema central, según el legislador, radica en la incapacidad del Estado boliviano de cumplir con sus obligaciones internacionales debido a la falta de dólares. Reyes señaló que Bolivia no tiene suficiente divisa para comprar combustibles de sus proveedores en Chile, Paraguay y Brasil, lo que ha generado el actual desabastecimiento.

«La verdadera situación es que el Estado boliviano no tiene la capacidad de pagos, faltan dólares para comprar combustibles, nadie nos fía», enfatizó. Además, criticó duramente la gestión de las autoridades interinas de YPFB y de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), a quienes acusó de ser ilegales en sus cargos y de no estar cumpliendo con los requisitos mínimos para garantizar el abastecimiento de combustible en el país.


Un «gasolinazo encubierto» en marcha

Uno de los puntos más preocupantes señalados por el diputado Reyes fue la estrategia del Gobierno de abastecer solo con gasolina Premium, lo que, según él, está creando una escasez de gasolina especial, lo que calificó como un «gasolinazo encubierto».

«Venimos denunciando este gasolinazo encubierto desde hace más de un año. El Gobierno no transparenta cuánto asciende la mezcla y tampoco cómo van a hacer para abastecer de combustibles al país», afirmó. Esta situación ha generado preocupación tanto en el sector del transporte como en la población en general, quienes ven cómo el precio del combustible podría incrementarse de manera indirecta debido a esta política.


Un círculo vicioso sin solución a la vista

Para el diputado Reyes, la raíz del problema no es solo la falta de dólares, sino también la crisis en la venta de gas que enfrenta el país. «Es una consecuencia la falta de dólares por la falta de mercados y venta de gas. Por eso no tenemos dólares y no hay dólares para pagar compromisos internacionales. Hoy estamos en un círculo vicioso económico y energético», explicó el legislador.

Esta combinación de factores ha generado una crisis que, según Reyes, el Gobierno no está preparado ni dispuesto a enfrentar. «Esta es una crisis energética y económica que el Gobierno no la piensa tratar», advirtió, dejando entrever que el panorama no es alentador para los próximos meses si no se toman medidas urgentes.


El transporte, el más afectado por la escasez

Finalmente, Reyes destacó que los transportistas han sido los más perjudicados por esta crisis, debido a la necesidad de hacer largas filas en las estaciones de servicio para conseguir combustible. Este problema, que afecta gravemente la economía de los transportistas, podría desembocar en nuevas movilizaciones si no se encuentra una solución pronta.

Con un escenario cada vez más crítico, Bolivia se encuentra atrapada en una crisis energética que amenaza con paralizar varios sectores clave de la economía, mientras la población sigue esperando respuestas claras por parte del Gobierno.

IL/Andina